Vamos a contar una historia sobre visados regionales de Australia: la historia de éxito de Mark.
Cuando Mark nos contactó, tenía un objetivo muy claro: cambiar de vida. Después de casi 15 años en el mismo trabajo y empresa, buscaba otros horizontes. Y había puesto los ojos en Australia.
Su idea era viajar a este país como estudiante e intentar conseguir un visado para quedarse. Además, quería llevarse con él a su pareja, Maite, y a la hija de ambos, Ainhoa. Los tres tenían nacionalidades distintas: ahora pronto podrán adquirir la australiana.
Y el caso de Mark era complejo por otras razones: no tenía estudios en alguna profesión que le diera posibilidades en Australia y estaba cerca de los 40 años (la edad, como la profesión, suele ser determinante a la hora de acceder a un visado permanente australiano).
Pero tenía algo a su favor: hijo de danés y de española, había estudiado en Barcelona en un colegio bilingüe y su inglés era muy bueno.
Otras dos cosas le ayudaron a alcanzar su meta: confiar en la estrategia de emigración de un agente de inmigración colegiado en MARA –Marcos Mateo, director de Experience Australia- y su persistencia.
Mark consiguió uno de los visados regionales de Australia y su hija Ainhoa está feliz en este país
Pero vamos a contar cómo fue el plan que diseñamos para Mark y cómo consiguió uno de los visados regionales de Australia y la residencia permanente (y con él, Maite y Ainhoa).
Organizar visados de estudiante de Australia para familias siempre es complejo. Cuando hay hijos en edad escolar (como Ainhoa), es necesario escolarizarlos en Australia para poder incluirlos en el visado del padre o de la madre. También hay que contratar el seguro médico obligatorio de estudiante para toda la familia.
¡Viajar a Australia en familia es costoso! E Inmigración suele mirar con mayor escrutinio los visados de estudiante para familias.
En el caso de Mark, además, había que apostar por algún curso que le pudiera servir para tener posibilidades de acceder a un visado estable para vivir y trabajar en Australia.
Analizamos con él las posibilidades y le propusimos estudiar un curso de formación profesional (denominados cursos VET en Australia) que le permitiría:
- Conseguir en 1 año un título australiano de cocinero
- Reducir el coste del colegio de su hija a la mitad (por estudiar en una institución pública como el instituto TAFE de Sydney, la ciudad de su elección)
“Lo que más me gustó fue que Experience Australia me propuso un curso de FP que me permitía conseguir una qualification válida para poder acceder a visados de patrocinio en solo un año», explica.
‘En cambio, los otros estudiantes extranjeros que encontré en el TAFE de Sydney habían contratado un paquete de cursos de cocina ¡de hasta 3 años! Después del certificate IV (el curso que yo completé), un diploma y un advanced diploma en Hospitality. Un dineral en cursos que no eran necesarios”.
La adaptación a Australia
Entretanto Mark estudiaba para cocinero, Ainhoa y Maite se iban adaptando a la vida australiana. Como suele ocurrir, Ainhoa, la más joven, fue la que lo consiguió más rápido. “Ella habla un inglés perfecto ahora y a veces hasta me corrige”, se ríe Mark.
Maite cuenta que la idea de marcharse de Barcelona, donde vivían, fue de Mark y que ella lo siguió con su hija a regañadientes: “Esperaba que Ainhoa nos dijera que quería volver y con esa excusa regresar a España. Pero sucedió todo lo contrario”.
Foto de Ainhoa y Maite en Sydney, al poco de llegar a Australia
“Ainhoa está encantada en Sydney y en su colegio: saca muy buenas notas. Además, es la vicecapitana de deporte y se está preparando para ser capitana. Ha sido campeona femenina en su escuela de bowling, pero hace de todo: basketball, netball…”.
“Antes era una niña más tímida –añade Maite- pero aquí prepara sola presentaciones para hablar en público y hasta está pensando ya en estudiar Veterinaria”.
Mark está feliz de ver a su hija tan integrada en Australia: “Fue pensando en ella que decidí venir aquí”.
Y hoy echa la vista atrás y asegura que todo el esfuerzo para conseguir uno de los visados regionales de Australia mereció la pena. Porque no fue un camino fácil e incluso tuvo dudas a mitad de su curso: llegó a plantearse si la cocina era lo suyo y si debía continuar.
Pero siguió adelante con el plan propuesto y con persistencia acabó logrando su objetivo de encontrar un sponsor en Australia. ¿Dónde? En una página web que recomendamos siempre para todo (conseguir alojamiento, trabajo etc.): Gumtree.com.au.
¿Y en qué lugar? En una isla tropical del norte de Australia que tuvo que buscar en el mapa.
Un visado regional con un trabajo en… Thursday Island
“Vi el anuncio y les contacté y me dijeron que fuera para una prueba. Y allí me presenté: casi me asusté al llegar –se ríe ahora recordándolo- porque era en una isla muy remota de Australia: Thursday Island”.
Imagen de Thursday Island, la isla donde Mark consiguió trabajo y un visado regional permanente
«Para llegar aquí –cuenta hoy desde Thursday Island- tienes que coger un vuelo doméstico a Cairns y luego otro vuelo regional, que es una avioneta más bien, y luego un barco…”.
“Hice la prueba y ¡me cogieron! Nuestros visados caducaban el 9 de enero y el visado de patrocinio quedó solicitado 3 días antes, el Día de Reyes, por lo que ya me dieron un visado “puente” que me permitía continuar en el país a mí y a mi familia y trabajar entretanto se tramitaba el visado 187”, explica.
“El 80% de la población en Thursday Island son aborígenes y personas procedentes de islas del Pacífico; los blancos somos minoría. Hay un supermercado, una farmacia, una tienda de cosas electrónicas, una cafetería -donde yo trabajo- y un par de hoteles pequeños. ¡Más “regional” imposible! Y les cuesta conseguir trabajadores estables, por eso recurren a patrocinar a extranjeros”.
“Mi jefe, el dueño de la cafetería, es muy majo –añade- y vivo en su casa en la parte de abajo. La cafetería está muy céntrica y vienen muchos funcionarios, policías, paramédicos… Porque aquí hay varios edificios del gobierno: uno de Agricultura y Pesca, Border Protection, un hospital…”.
Mark explica que esta etapa en Thursday Island se la toma como algo temporal y ya está pensando en su futuro en Australia: “Pronto podré pedir la ciudadanía y también Maite y Ainhoa, claro”.
¡Misión cumplida! (Mark victorioso en Thursday Island con su visado permanente)
Y recuerda cuando llegó a Australia casi sin saber cocinar…
«Todo el esfuerzo, tiempo y dinero invertido en conseguir este visado permanente valió la pena -asegura Mark-. Y estoy muy agradecido al apoyo constante del equipo de Experience Australia, que me han guiado siempre en la dirección correcta y me han apoyado hasta llegar aquí”.
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Si estás interesado en visados para vivir y trabajar en Australia y quieres confirmar tus posibilidades de acceder a uno, contáctanos. Nunca te asesores sobre visados con personas no cualificadas para dar consejo en esta materia. Emigrar a Australia es complejo.
En Experience Australia podemos proporcionar consejo legal en materia de visados y emigración porque somos agentes de inmigración colegiados en la Migration Agents Registration Agents Authority (MARA) de Australia.
