Por qué Australia

Australia es uno de los países con mejor calidad de vida del mundo y también uno de los más seguros y estables. De hecho, cinco capitales australianas han sido clasificadas entre las diez mejores ciudades del planeta para vivir, según una encuesta realizada por The Economist en la que se examinaron factores tales como la seguridad y la salud; la cultura, el ambiente y el clima; y las infraestructuras. Pero es que, además de un país moderno, Australia es un país con un coste de vida relativamente bajo, sobre todo, si se compara con otros destinos como Inglaterra o Estados Unidos.

Por el carácter abierto de los australianos

Australia es una nación multicultural, forjada por emigrantes, que acepta a los extranjeros sin prejuicios. Los australianos son, en general, muy sociables y amigos de reunirse en torno a una buena barbacoa. También les encanta la vida al aire libre, la cerveza, y deportes como el rugby, el fútbol australiano o el cricket, aparte, por supuesto, del surf, toda una especialidad nacional. Australia es, asimismo, un país muy igualitario, que no sabe de diferencias sociales.

Por sus atractivos naturales y su clima

Australia es, sobre todo, naturaleza. El continente cuenta con cientos de parques nacionales e islas paradisíacas. No sólo ofrece paisajes contrastados – desde tropical a desértico – y una flora y una fauna únicas, sino también diferentes climas y uno de los ambientes menos contaminados del planeta. La Gran Barrera de Coral o el mítico monolito conocido como Uluru (lugar sagrado para los aborígenes) son algunos de los reclamos naturales más famosos del país. www.australia.com (Información turística sobre Australia)

Por su calidad de enseñanza

En Australia, los cursos intensivos de inglés para estudiantes internacionales se imparten en las instituciones ELICOS (English Language Intensive Courses for International Students), que han de cumplir unas estrictas normas de calidad, las cuales afectan desde al número de alumnos por clase, a los métodos y materiales de enseñanza o a la cualificación profesional de los profesores. Se trata, pues, de una enseñanza con garantías. De hecho, los australianos presumen de que su sistema oficial de acreditación para la enseñanza de inglés es de los mejores del mundo.